Los ciudadanos de países de la UE que pretendan permanecer en Italia por un período máximo de tres meses tienen derecho a permanecer en el territorio nacional sin ninguna condición, salvo la posesión de un documento de identidad válido para la expatriación. Si, por el contrario, tienen intención de permanecer en Italia durante un periodo superior a tres meses, deben inscribirse en el registro civil del municipio en el que tienen intención de residir, en los tres meses siguientes a su entrada.
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